La Nintendo Switch 2 aún no tiene asegurada la retrocompatibilidad con la Switch original
La Nintendo Switch 2 es uno de los proyectos más esperados y misteriosos de la compañía japonesa, que podría lanzar su nueva consola en algún momento de 2024.
La retrocompatibilidad es la capacidad de una consola de reproducir juegos de generaciones anteriores, lo que permite a los usuarios disfrutar de su biblioteca de títulos sin tener que cambiar de dispositivo. Es una característica muy valorada por los jugadores, que pueden ahorrar dinero y espacio al no tener que comprar o conservar varias consolas.
Nintendo ha sido una de las empresas pioneras en ofrecer retrocompatibilidad en sus consolas, desde la Game Boy Advance hasta la Wii U. Sin embargo, con la llegada de la Switch, Nintendo rompió esta tradición, ya que la consola híbrida no es compatible con los juegos de Wii U, Wii, GameCube o anteriores.
Esto se debe a que la Switch utiliza un sistema operativo y un hardware diferentes a los de sus predecesoras, lo que dificulta la emulación de los juegos antiguos. Además, la Switch tiene un formato de cartuchos propio, que no coincide con el de los discos ópticos o las tarjetas de memoria que usaban las consolas anteriores.
Por lo tanto, la pregunta es: ¿podrá la Switch 2 solucionar este problema y ofrecer retrocompatibilidad con la Switch original? La respuesta corta es: no lo sabemos. Nintendo no ha confirmado ni desmentido nada al respecto, y solo hay rumores y especulaciones sobre las características y especificaciones de la Switch 2.
HABLANDO DE LA POTENCIA DE LA NINTENDO SWITCH 2
Si no hay sorpresas de por medio, NVIDIA volverá a estar detrás de una consola portátil de Nintendo. En concreto, empleará un SoC con núcleos con arquitectura Arm combinados con su propia arquitectura gráfica. Esto se traduce en ofrecer 8 núcleos Cortex-A78AE a 2,00 GHz junto a un chip gráfico basado en la arquitectura Ampere (GeForce RTX 30 Series). Estos llegarían con 1.024 CUDA Cores junto a 32 Tensor Cores. Esto implicaría tener algo menos de la mitad de núcleos que una NVIDIA GeForce RTX 3050.
Sin saber frecuencias, ni cualquier otra mejora u optimización, podríamos estar hablando, por ahora, y bajo el papel, del rendimiento de una GeForce GTX 1050 Ti. Eso únicamente mirando el chip. Su rendimiento final debería mejorar a ofrecer una memoria más rápida y con mayor ancho de banda. Como referencia, la RTX 3050 tiene más del doble de ancho de banda que la GTX 1050 Ti.
Esta memoria será unificada y se traducirá en 16 GB de capacidad. Presumiblemente, hablamos de una memoria GDDR6, por lo que en términos de ancho de banda, se podría mover como una RTX 3050, como mínimo. Esto será esencial si tenemos en cuenta que Nintendo promete ofrecer su primera consola portátil capaz de reproducir juegos a una resolución 4K. Eso sí, con algo de truco, y es que la tecnología NVIDIA DLSS tendría un papel protagonista para realizar un reescalado que permita jugar a mayores resoluciones con un mejor rendimiento sin que afecte prácticamente a la apariencia visual del juego.
0 Comentarios