iPhone 14 Pro Max vs Samsung Galaxy S23 Ultra: ¿cuál es el mejor smartphone?
El iPhone 14 Pro Max y el Samsung Galaxy S23 Ultra son dos de los smartphones más potentes y avanzados que existen, y compiten por el trono de los mejores teléfonos del año. Ambos ofrecen unas especificaciones impresionantes, unas cámaras excelentes, unas pantallas increíbles y unas baterías duraderas.
El precio es uno de los factores más importantes a la hora de elegir un smartphone, y en este caso hay una diferencia notable entre el iPhone 14 Pro Max y el Samsung Galaxy S23 Ultra. El primero tiene un precio base de 1.299 euros, mientras que el segundo cuesta 1.199 euros. Ambos son muy caros, pero el iPhone es 100 euros más caro que el Samsung.
Sin embargo, hay que tener en cuenta que el precio base del iPhone 14 Pro Max corresponde al modelo de 128 GB de almacenamiento interno, mientras que el del Samsung Galaxy S23 Ultra corresponde al modelo de 256 GB. Es decir, el Samsung ofrece el doble de capacidad por menos dinero. Si queremos igualar la capacidad del Samsung con el iPhone, tendríamos que pagar 1.399 euros por el modelo de 256 GB del iPhone 14 Pro Max.
Además, tanto el iPhone como el Samsung tienen otras opciones de almacenamiento más amplias y más caras. El iPhone 14 Pro Max tiene modelos de 512 GB y 1 TB, que cuestan 1.599 euros y 1.799 euros respectivamente. El Samsung Galaxy S23 Ultra tiene modelos de 512 GB y 1 TB, que cuestan 1.299 euros y 1.499 euros respectivamente.
Por tanto, en términos de precio, el Samsung Galaxy S23 Ultra es más barato que el iPhone 14 Pro Max en todas las opciones de almacenamiento, ofreciendo una mejor relación calidad-precio.
Componentes
Los componentes son los elementos que determinan el rendimiento y las capacidades de un smartphone, como la pantalla, la cámara, el procesador o la batería. En este apartado vamos a comparar los componentes más importantes del iPhone 14 Pro Max y del Samsung Galaxy S23 Ultra.
Pantalla
La pantalla es uno de los componentes más visibles y apreciados de un smartphone, ya que es donde se muestra todo el contenido y se interactúa con él. Tanto el iPhone como el Samsung tienen unas pantallas excelentes, pero con algunas diferencias.
El iPhone 14 Pro Max tiene una pantalla OLED de 6,7 pulgadas con una resolución de 2778 x 1284 píxeles, lo que le da una densidad de píxeles de 458 ppp (píxeles por pulgada). La pantalla tiene un brillo máximo de 1200 nits, lo que le permite mostrar imágenes claras y nítidas incluso bajo la luz del sol. La pantalla también tiene una tasa de refresco adaptativa de hasta 120 Hz, lo que significa que puede ajustar su velocidad según el contenido que se muestra, ofreciendo una mayor fluidez y ahorro de batería.
El Samsung Galaxy S23 Ultra tiene una pantalla AMOLED de 6,8 pulgadas con una resolución de 3200 x 1440 píxeles, lo que le da una densidad de píxeles de 516 ppp. La pantalla tiene un brillo máximo de 1750 nits, lo que le permite mostrar imágenes más brillantes y contrastadas que el iPhone. La pantalla también tiene una tasa de refresco adaptativa de hasta 120 Hz, con la misma ventaja que el iPhone.Por tanto, en términos de pantalla, el Samsung Galaxy S23 Ultra es ligeramente superior al iPhone 14 Pro Max, ya que tiene una pantalla más grande, más resolución, más brillo y más densidad de píxeles. Sin embargo, la diferencia no es muy grande, y ambos ofrecen una calidad de imagen excelente.
Cámara
La cámara es otro de los componentes más valorados de un smartphone, ya que permite capturar momentos y recuerdos con una gran calidad. Tanto el iPhone como el Samsung tienen unas cámaras excelentes, pero con algunas diferencias.
El iPhone 14 Pro Max tiene una cámara trasera de cuatro sensores: un sensor principal de 48 megapíxeles con apertura f/1.7, un sensor ultra gran angular de 12 megapíxeles con apertura f/2.2, un sensor teleobjetivo de 10 megapíxeles con apertura f/2.4 y zoom óptico de 3x, y un sensor teleobjetivo de 10 megapíxeles con apertura f/4.9 y zoom óptico de 10x. La cámara también tiene un zoom digital de hasta 100x, que se llama Space Zoom, y un sistema de enfoque automático láser. La cámara puede grabar vídeos en resolución 8K a 30 fps, 4K a 60 fps y Full HD a 120 fps.
El Samsung Galaxy S23 Ultra tiene una cámara trasera de cinco sensores: un sensor principal de 200 megapíxeles con apertura f/1.7, un sensor ultra gran angular de 12 megapíxeles con apertura f/2.2, un sensor teleobjetivo de 10 megapíxeles con apertura f/2.4 y zoom óptico de 3x, un sensor teleobjetivo de 10 megapíxeles con apertura f/4.9 y zoom óptico de 10x, y un sensor ToF (Time of Flight) para medir la profundidad. La cámara también tiene un zoom digital de hasta 100x, que se llama Space Zoom, y un sistema de enfoque automático láser. La cámara puede grabar vídeos en resolución 8K a 30 fps, 4K a 60 fps y Full HD a 120 fps. La cámara frontal es de 40 megapíxeles con apertura f/2.2 y puede grabar vídeos en resolución 4K a 60 fps.
Por tanto, en términos de cámara, el Samsung Galaxy S23 Ultra es claramente superior al iPhone 14 Pro Max, ya que tiene un sensor principal mucho más grande y potente, un sensor frontal más resolutivo y un sensor ToF adicional. Sin embargo, hay que tener en cuenta que la calidad de las fotos y los vídeos no depende solo de los megapíxeles, sino también del procesado de imagen, la estabilización, el rango dinámico, el color y otros factores.
Procesador
El procesador es el componente que determina la velocidad y la potencia de un smartphone, ya que es el encargado de ejecutar las aplicaciones y los juegos. Tanto el iPhone como el Samsung tienen unos procesadores muy potentes, pero con algunas diferencias.
El iPhone 14 Pro Max tiene el procesador A16 Bionic, que es el chip más avanzado de Apple hasta la fecha. Se trata de un procesador de ocho núcleos (dos núcleos rápidos y seis núcleos eficientes) fabricado con un proceso de 5 nanómetros, lo que le permite ofrecer un rendimiento muy alto con un consumo energético muy bajo. El procesador también tiene una GPU (unidad gráfica) integrada de cinco núcleos, que se encarga de los gráficos y los efectos visuales, y una NPU (unidad neuronal) integrada de dieciséis núcleos, que se encarga del aprendizaje automático y la inteligencia artificial.
El Samsung Galaxy S23 Ultra tiene el procesador Snapdragon Gen 2, La CPU sube la velocidad de reloj desde los 3,2 GHz de la versión estándar hasta los 3,36 GHz. Lo mismo sucede en GPU, que pasa de 680MHz a 719MHz. Más adelante, en las pruebas de rendimiento, te contaremos las implicaciones que tiene este overclock. Nuestra unidad analizada cuenta con 12 GB de RAM LPDDR5X y 256 GB UFS 4.0, y sobre el rendimiento bruto solo podemos hablar maravillas.
Uso ligero, uso pesado, grabación 8K. Este Galaxy S23 Ultra es fluido, muy fluido, y la potencia bruta logra que One UI no lastre el rendimiento en términos generales (en el apartado del software hablaremos de un pequeño pero). El pasado curso tuvimos problemas gráficos con la GPU de AMD en juegos como 'Genshin Impact' o 'PUBG New State'. Este año, todos los juegos vuelan. Hemos medido la estabilidad de los FPS en propuestas como 'New State' con los gráficos en Ultra y HDR, manteniéndose la línea de los 60 FPS bastante plana.
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